24 Ago Cómo identificar una empresa que impulsa la «cultura del agotamiento»

La cultura del constante ajetreo, la extenuación y el bullicio se manifiesta de manera distintiva en aquellas empresas donde impera la norma de trabajar largas jornadas, sacrificando la vida personal y donde el concepto de descanso apenas encuentra cabida. El eje central que da origen a este fenómeno es la creencia de que el «trabajo arduo» constituye la llave del éxito. No obstante, estas dinámicas pueden imponer un costo considerable en la salud de las personas y, paradójicamente, minar la productividad.

Bermúdez Abogados es un despacho especializado en derecho laboral con más de 35 años de experiencia asesorando a empresas y particulares.

Estos patrones culturales organizacionales se han intensificado con la proliferación de las redes sociales y la emergencia de influencers y líderes empresariales que enaltecen la idea del esfuerzo constante. No obstante, el Instituto Adecco advierte que en realidad esto se traduce en una forma de adicción al trabajo.

«Este fenómeno ha generado una avalancha de videos con el hashtag ‘#sidehustles’, con más de 1,800 millones de reproducciones en TikTok. Esto ha provocado una interminable oleada de publicaciones en redes sociales con el mensaje ‘levántate y avanza’, así como una ola de música y televisión que celebra a individuos supuestamente dedicados que sacrifican todo por alcanzar el éxito», señala la institución.

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), anualmente fallecen 750 mil personas en todo el mundo debido a la excesiva carga laboral y las jornadas extenuantes.

«Todo parte de un paradigma que hemos arraigado profundamente en nuestra cultura, que equipara el esfuerzo con la productividad. Nos hemos acostumbrado a creer que cuanto más nos esforzamos, más productivos somos. Esto ha impulsado a las personas a multiplicar el esfuerzo en su búsqueda de productividad o reconocimiento», explica Arístides Ramírez, CEO de Ariva Consultores.

¿Cómo se puede reconocer una cultura de ajetreo en el entorno laboral? El Instituto Adecco identifica al menos seis indicios:

#1 Se elogia o reconoce a los empleados por trabajar muchas horas.

#2 Las comunicaciones vía correo electrónico y mensajes se emiten a todas horas, incluso durante los fines de semana.

#3 Se enorgullecen de sacrificar la vida personal, alardeando de dormir poco, omitir comidas y adoptar otros hábitos poco saludables.

#4 Los empleados se sienten orgullosos de no hacer uso de días de descanso ni tiempo libre, incluso si están remunerados.

#5 El trabajo es mucho más importante que la vida personal.

#6 Ante la necesidad de ayuda por parte de un colaborador, se sugiere encontrar una «solución creativa» en lugar de proporcionar recursos y apoyo adicionales.

«Aunque la cultura del ajetreo puede parecer atractiva, ejerce una presión abrumadora sobre todos los involucrados, y los cambios económicos recientes, como la inflación, han agravado aún más esta presión. Esta cultura tiene implicaciones profundas en la salud mental, pero sus efectos no se limitan a eso. Con el tiempo, el exceso de trabajo y el estrés intenso pueden afectar seriamente nuestro bienestar físico», advierte la organización.

El agotamiento laboral, una de las ramificaciones de las culturas basadas en el ajetreo laboral, puede conducir a una disminución de la productividad debido al bajo rendimiento de los empleados. Los problemas de salud mental que emergen como resultado de estos ritmos de trabajo pueden representar un costo de hasta el 15% de la nómina para las empresas, según las estimaciones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

¿Cómo se puede alcanzar un equilibrio entre la vida laboral y personal?

Según el informe Tiempo de trabajo y equilibrio vida-trabajo en el mundo de la OIT, México ocupa el segundo lugar en términos de desequilibrio en este aspecto, con un 41.7% de la fuerza laboral experimentando subempleo o sobreempleo. Esta cifra solo es superada por Filipinas (43.2%).

«Mantener la armonía entre la vida personal y el trabajo es un desafío importante. Aunque en México estamos acostumbrados a lidiar con el estrés, los efectos dañinos en la salud, relaciones y bienestar general a mediano y largo plazo son significativos. Además, las empresas y los equipos de trabajo también experimentan una considerable disminución en su productividad y motivación», afirma Nora Taboada, fundadora de AFE-Liderazgo Consciente.

La experta ofrece algunas recomendaciones para lograr un equilibrio saludable entre la vida personal y laboral, y evitar así daños en la salud mental:

-Establecer límites en el trabajo.

-Ceder ante la presión de ajustar la agenda para complacer a otros no siempre es la decisión correcta.

-Dedicar momentos del día a tareas específicas sin intentar resolverlo todo. Priorizar las actividades y no asumir que todo es urgente.

-Tomar descansos. El ritmo laboral ininterrumpido no es sostenible, de hecho, es inviable. Las pausas son esenciales para mantener la productividad.

-Fomentar hábitos saludables, desde una dieta balanceada hasta reservar tiempo para el ejercicio.

-Asignar tiempo para el ocio; los momentos de diversión y relajación también son cruciales.

El lograr un equilibrio es un desafío compartido por la mayoría de los trabajadores en el país. Según el estudio Salud mental en el trabajo realizado por el Workforce Institute de UKG, el 76% de las personas reconoce que el trabajo impacta negativamente en su vida familiar.

Bermúdez Abogados somos una firma especializada en derecho laboral. Asesoramos en la prevención y conciliación laboral en empresa, ayudando en el éxito de la misión corporativa.

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Fuente: El Economista